Luque Bio

MEDIO AMBIENTE

NUESTRO OLIVAR REDUCE EMISIONES DE CO2

La preocupación por el Medio-ambiente, la preservación de los recursos y el desarrollo de una actividad sostenible nos ha obligado a investigar en los aspectos técnicos de la explotación de los olivares y de la elaboración del aceite.

La reutilización de los subproductos de la almazara nos ha llevado a trabajar en procesos de compostaje para conseguir que la materia orgánica vuelva al olivar y mejorar así el suelo agrícola, básico en Agricultura Ecológica. Asimismo, el uso de cubiertas vegetales contribuye a dicha mejora.

El uso de energías renovables ha sido siempre clave para nosotros, por lo que hemos buscado en el mercado aquel proveedor que fuera capaz de asegurarnos un abastecimiento 100% proveniente de dichos tipos de energía. Asimismo, la instalación de placas solares en la cubierta de nuestras naves y en campo para riego de las plantaciones se ha convertido en una prioridad en los últimos años.

El proceso productivo en nuestras instalaciones se encuentra certificado, asimismo, bajo el estándar ISO 14001 que garantiza el máximo respeto al medioambiente.

Como consecuencia de nuestra preocupación, en 2009 desarrollamos el protocolo de cálculo de huella de carbono “CO2 Verificado”, pionero en España. La evolución lógica del mercado nos ha llevado posteriormente a la certificación de nuestro AOVE bajo el protocolo E.P.D. (Declaración Ambiental de Producto), reconocido a nivel internacional y que amplía el ámbito de estudio medioambiental.

El dato más relevante obtenido, y que los potenciales consumidores pueden valorar de forma más objetiva, es el siguiente:

POR CADA LITRO DE ACEITE DE OLIVA VIRGEN EXTRA ECOLÓGICO LUQUE SE RETIRAN CASI 10 KG DE CO2 DE LA ATMOSFERA

La colocación de una nueva instalación de placas solares para autoconsumo en 2020 contribuirá a reducir aun más nuestra huella de carbono en el futuro. Además, esta instalación nos permite contar con un punto de carga de vehículos eléctricos para nuestros empleados y clientes.

Toda esta trayectoria nos ha llevado a ser considerados “Ejemplo Empresarial” en la Cumbre del Clima COP 25 de Madrid.

AMPLÍA LA INFORMACIÓN

Para LUQUE ECOLOGICO, S. L. el uso de los subproductos en la actividad industrial y agrícola ha sido siempre una prioridad.  De esta forma, nuestro objetivo desde siempre ha sido claro: valorizar dichos subproductos (alpeorujo, hojas, principalmente) y hacer que vuelvan al campo de donde proceden, cerrando así el ciclo de nutrientes en el sistema productivo.

Para ello, desde el año 2.000 desde LUQUE ECOLOGICO, S. L. se han iniciado ensayos orientados a la valorización del alpeorujo como abono orgánico mediante un proceso de compostaje con diversas materias orgánicas procedentes de otros procesos (paja, hojas, serrin …). Esta inquietud nos llevará en breve a la construcción de una planta de compostaje en donde transformar el alpeorujo procedente de la almazara en un abono orgánico con unas cualidades idóneas para la fertilización del olivar.

De esta forma, conseguiremos algo que en Agricultura Ecológica es vital: mejorar la fertilidad de los suelos. El destino principal de este producto transformado en abono orgánico es la aplicación en olivares ecológicos. El aporte de Materia Orgánica sin duda favorecerá las condiciones de estos suelos en donde se cultivan los olivos. La mejora de la estructura del suelo, el aumento de la capacidad de retención de agua, la mejor movilización de los elementos del suelo para el mejor aprovechamiento de los árboles, el propio aporte de nutrientes, etc… son consecuencia directa de estos aportes de enmiendas orgánicas. Esto hará que los suelos pobres se mejoren favoreciendo de forma notoria el indicador medioambiental “suelo” como estrato o soporte físico de toda la biodiversidad del entorno, asegurándonos la conservación de los recursos naturales. Como consecuencia de la mejora de la fertilidad se verán favorecidos toda la diversidad biológica del entorno.

El compostaje se trata de un proceso biológico de fermentación en presencia de oxígeno. Durante este proceso se suceden una serie de etapas caracterizadas por la actividad de distintos organismos, existiendo una relación muy estrecha entre la temperatura, el pH y el tipo de microorganismos. Así, al principio del proceso la masa está a temperatura ambiente, los microorganismos que contienen empiezan una actividad frenética que hace que la temperatura alcance valores mayores de 40 ºC, siendo las bacterias la que predominan. Posteriormente se produce una etapa de enfriamiento donde actúan fundamentalmente los hongos y por último se da una fase de maduración o estabilización donde la masa vuelve a temperatura de ambiente.

La energía solar fotovoltaica se plantea como una solución para la reducción de emisiones de CO2, cada kilovatio de energía solar generada deja de emitir 0,311 Kg de CO2 en la atmosfera.

Por este motivo en LUQUE ECOLOGICO, continuando con nuestra permanente preocupación por el medioambiente, hemos considerado que podemos ayudar de esta forma a minimizar las emisiones de CO2 a la atmosfera y en 2011 nos planteamos la colocación de un sistema de paneles fotovoltaicos en la cubierta de nuestra nave de bodega.

Se trata del sistema de esas características de mayor tamaño que hay en todo la zona, siendo capaz de generar una potencia de 35 Kwp y llega a reducir hasta un 20% las emisiones de CO2.

En 2020 vamos a realizar otra la instalación de paneles solares en cubierta con el fin de ser autoabastecernos (82%) y ser casi autosuficientes durante todo el año, por lo que aun disminuiremos más nuestra huella de carbono. La instalación en cuestión va a ser de 12,21 kwp y contará con 2 puntos de abastecimiento para vehículos eléctricos.

En todo caso, y como venimos haciendo hasta este año, la energía eléctrica que tengamos que adquirir provendrá 100% de energías renovables (“verdes”).

En nuestras explotaciones agrícolas también estamos implantando la instalación de placas solares para el bombeo del agua de riego, lo cual contribuirá igualmente a la reducción de nuestra huella de carbono.

Antecedentes

En octubre de 2008, LUQUE ECOLOGICO anunció su intención de comenzar un programa voluntario de etiquetado de huella de carbono (HC) en 2009. La etiqueta inicialmente sería aplicable a nuestro aceite de oliva ecologico LUQUE y lo calificaría según el CO2 emitido durante la vida útil del producto desde la adquisición de materias primas hasta la producción, distribución, uso y eliminación final.

Después de someterse al procedimiento, el etiquetado HC se aplicará a una amplia variedad de productos y estos eventualmente podrían incluirse en el esquema de etiquetado voluntario.

La propuesta complementa los compromisos de los principales países asumidos bajo el protocolo de Kioto para reducir las emisiones de CO2 al 6 por ciento de los niveles de 1990 para 2012. Nuestra compañía ha estado preocupada por encontrar formas de lograr este objetivo, que con solo cuatro años restantes está resultando cada vez más difícil de lograr.

En cooperación con una consultoría, estamos formulando estas pautas. El etiquetado de carbono coincide con el objetivo general de LUQUE ECOLÓGICO de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y nos gustaría ver a los consumidores cambiar su estilo de vida de una manera que resulte en menos emisiones de CO2.

Otros países que consideran regulaciones similares incluyen Reino Unido, Francia y Alemania.

Existen algunos otros programas que evalúan la ecología de los productos agrícolas y forestales, como el programa de “millaje de alimentos”, el MSC (Marine Steward Council) y los programas Marine Eco Label Japan (MEL Japan) para productos del mar y varias “certificaciones forestales”. Programas como el Forest Stewardship Council (FSC), Sustainable Forestry Initiative (SFI), Program for the Endorsement of Forest Certification (PEFC) y Sustainable Green Eco-Council (SGEC).

PRINCIPALES ASPECTOS DE LA PROPUESTA

Proyecto piloto de etiquetado de carbono

LUQUE ECOLOGICO comenzará un proyecto piloto de un año para el etiquetado de HC en la primavera o el verano de 2009. Actualmente 4 empresas más, la mayoría de las cuales son ecologicas, han acordado participar en el proyecto. No se creará una etiqueta estándar hasta algún momento de 2009. En este punto, todos los productos que participan en el proyecto se fabrican en el país, aunque algunos contienen ingredientes importados. Ya sea que participe directamente en el proyecto piloto o simplemente que ofrezca comentarios o sugerencias sobre las directrices, la Junta de Andalucía alienta a las empresas a participar en el Proyecto para garantizar que las directrices se desarrollen de una manera que no coloque productos importados en cualquier desventaja.

Alcance Público
 
LUQUE ECOLOGICO ha realizado varios eventos de divulgación para compartir información sobre el proyecto con los consumidores y el sector de distribución.
 
LUQUE ECOLOGICO celebrará un período de comentarios públicos en 2009 y se espera que pronto publique un informe final. El esquema de etiquetado podría verse afectado significativamente por la reacción de la industria alimentaria nacional a las directrices y el período de prueba. LUQUE ECOLOGICO también llevará a cabo una encuesta de consumidores sobre el esquema en diferentes exposiciones durante 2009.
 
Implicaciones para el etiquetado de la huella de carbono
 
Uno de los principales desafíos asociados con el etiquetado de HC es la dificultad de crear un cálculo para las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que sea consistente y preciso. Un producto determinado puede tener diferentes puntuaciones en función del cálculo empleado. La razón principal de la disparidad es la gran cantidad de puntos de datos involucrados. Por ejemplo, las emisiones de CO2 pueden variar ampliamente dependiendo de la producción o el uso del producto y la fuente de energía involucrada. En el mejor de los casos, el cálculo es una estimación aproximada basada en una serie de aproximaciones en lugar de mediciones concretas.
 
El cálculo de las emisiones de GEI para el aceite de oliva ecológico de un olivar ecológico, por ejemplo, demuestra las complejidades involucradas en la producción de mediciones precisas. La maquinaria y la industria pueden ser una fuente importante de emisiones de GEI. La cubierta vegetal, los fertilizantes orgánicos, el uso de hueso de aceituna como combustible, los residuos de compostaje para su aplicación en los campos, el uso de paquetes reciclados … ayudarán a reducir las emisiones. Una estimación de las emisiones de CO2 requeriría cuantificar y asignar las emisiones totales entre todas las fuentes.
 
La propuesta de etiquetado de CO2 de LUQUE ECOLOGICO requiere la creación de una metodología básica con elementos específicos que caigan en varias categorías amplias. Bajo el piloto, la Junta de Andalucía y la consultora crearán sus propias propuestas de etiquetado. Permitirá a las empresas desarrollar diferentes metodologías que estarán sujetas a revisión y aprobación por parte de varios comités.
 
Impacto en el consumidor
 
El etiquetado de CO2 puede ser útil para los consumidores como una guía general. Sin embargo, con las complejidades de cálculo involucradas, las etiquetas de HC están inevitablemente simplificadas y pueden conducir a malentendidos de los consumidores y, en última instancia, incredulidad. La falta de espacio en las etiquetas HC evitará que se presente suficiente información para que un consumidor comprenda completamente el producto. Por otro lado, demasiada información en la etiqueta crearía confusión adicional.
 
Impacto en la industria
 
Ciertos productos estarán en desventaja competitiva con el etiquetado HC. En general, los artículos que se procesan mínimamente, como las frutas y verduras, tendrán menos emisiones de CO2 que aquellos sujetos a un mayor procesamiento. Los productos a base de plantas pueden tener mejores puntuaciones que los productos carnicos y mariscos debido a los efectos mitigantes de la planta sobre el CO2 en la atmósfera. Las emisiones de CO2 pueden variar según el área o el clima producido. Las frutas cultivadas en huertos podrían estar asociadas con menos emisiones de CO2 que las cultivadas en invernaderos. E incluso los productos ecológicos obtendrán mejores puntuaciones que los convencionales. Será nuestro caso: aceite de oliva ecológico LUQUE.
 
El embalaje puede ser un factor importante en la producción de CO2 de un artículo, como las latas de aluminio utilizadas para bebidas. En general, se piensa que el transporte de artículos puede ser una fuente importante de emisiones, especialmente para los artículos que se transportan por vía aérea. Esta es una desventaja potencial para el producto comercializado internacionalmente; sin embargo, en algunos casos, el envío puede ser comparable o ventajoso con otras formas de transporte, como el transporte por camión, según las condiciones y la distancia.

Resumen.

LUQUE ECOLOGICO, S. L. viene desarrollando desde hace años un compromiso claro por desarrollar sus operaciones de una manera sostenible y respetuosa con el Medioambiente. Fue la primera almazara del mundo en calcular la huella de carbono de su Aceite de Oliva Virgen Extra Ecológico según PAS 2050 en el año 2008 con un compromiso claro añadido de trabajar en su reducción (PROTOCOLO “CO2 Verificado” en colaboración con DNV).

Además, desarrolla la gestión agronómica del olivar con prácticas de producción ecológica y lucha biológica, lo que les confiere una gran biodiversidad en el ecosistema del cultivo.

Toda esta estrategia que ofrece unos beneficios incuestionables sobre el entorno, hasta ahora no había sido cuantificada globalmente de una manera metodológicamente solvente, apoyada sobre indicadores objetivos y reconocidos internacionalmente.

Habiendo detectado la sensibilidad en el mercado de recibir información sencilla y solvente acerca de esta estrategia, LUQUE ECOLOGICO entiende que todos estos valores deben ser trasladados y comunicados en sus productos y para ello considera que la EPD (Declaración Ambiental de Producto) es la mejor alternativa.

Descripción:

Una EPD® es una declaración ambiental certificada elaborada en conformidad con la norma internacional ISO 14025 (Declaraciones Ambientales Tipo III). Se trata de una información ambiental de producto/servicio basado en el análisis de ciclo de vida (ACV) y en otra información relevante, en cumplimiento con la norma.

Hemos realizado un análisis de ciclo de vida del AOV siguiendo los principales estándares internacionales (ISO 1044) para que los resultados obtenidos de manera objetiva puedan ser entendidos en cualquier parte del mundo.

El análisis de ciclo de vida contempla todas las fases de nuestro aceite, comenzando por las materias primas necesarias en la Agronomía para continuar inventariando todas las operaciones que tienen lugar en las distintas operaciones agronómicas, entrando después en la almazara, hasta finalizar cuando el producto abandona el control de la empresa en cualquier parte del mundo.

Las categorías de impacto consideradas para la evaluación de impacto asociada a la producción del AOVE conforme al PCR 2010:07, son los siguientes:

    • Recursos energéticos no renovables
    • Calentamiento global potencial
    • Insumos no renovables
    • Adelgazamiento capa de ozono
    • Insumos renovables
    • Agotamiento recursos abióticos
    • Recursos energéticos renovables
    • Uso de suelo
    • Consumo eléctrico
    • Ecotoxicidad terrestre
    • Consumo de agua
    • Ecotoxicidad sobre agua fresca
    • Oxidación fotoquímica
    • Ecotoxicidad sobre agua marina
    • Acidificación
    • Ecotoxicidad sobre humanos
    • Eutrofización

Todos los procesos/sistemas que han intervenido en este tiempo para mejorar los resultados medioambientales has sido:

    • Prácticas de Agricultura Ecológica en el olivar
    • Cubiertas vegetales en las calles del olivar ecológico
    • Incorporación de restos de poda al suelo del olivar ecológico
    • Reutilización de aguas de proceso provenientes del molino para riego de olivares ecológicos
    • Incorporación de hojas provenientes del molino para mejora de materia orgánica del suelo de los olivares ecológicos
    • Planta de compostaje para el subproducto del molino (alperujo) y su posterior incorporación al terreno para mejora de materia orgánica del suelo de los olivares ecológicos
    • Colocación de paneles solares en cubierta del molino para suministro de energía eléctrica
    • Colocación de paneles solares en los olivares para suministrar energía eléctrica a los equipos de riego.
    • Utilización de subproducto del molino (hueso de aceituna) como combustible de caldera
    • Recuperación/reciclaje de todo material auxiliar utilizado en molino y en el olivar ecológico

  

Resultados del Análisis de Ciclo de Vida

El dato más relevante obtenido, y que los potenciales consumidores pueden valorar de forma más objetiva, es el que hacer referencia a la Huella de Carbono de nuestro producto, el cual se muestra a continuación:

POR CADA LITRO DE ACEITE DE OLIVA VIRGEN EXTRA ECOLÓGICO LUQUE SE RETIRAN CASI 10 KG DE CO2 DE LA ATMOSFERA.

 

Las empresas son un agente fundamental en la lucha climática y algunas de ellas ya son verdaderas pioneras.

En la pasada Cumbre del Clima (COP25) que tuvo lugar en diciembre en Santiago de Chile – Madrid donde gobiernos de todo el mundo se reunieron para tratar de mitigar los efectos negativos del Cambio Climático y se han querido enseñar al mundo las mejores iniciativas empresariales que apuestan por la sostenibilidad y la acción climática.

Y una de ellas ha sido LUQUE ECOLOGICO, S.L. pues hemos recibido el reconocimiento como Ejemplo Empresarial de Acciones por el Clima en la categoría “Mitigación cambio climático”.

Nuestra iniciativa ha sido destacable por:

    • Ser el primer producto agroalimentario en España con Huella de Carbono y Ambiental certificada y verificada por 3ª parte (DNV)
    • Contribuir a la mitigación del cambio climático actuando en las fases “calientes” del ciclo de vida,
    • Mantenimiento de la biodiversidad y del equilibrio del ecosistema
    • Reducción de costes asociados,
    • Reutilización de subproductos (restos de poda, alpeorujo, hojas, …)